lunes, 30 de marzo de 2009

Prefiero soñar

Allí estabas. Tu sonrisa diferenciandote del resto.
La multitud me impedía acceder a vos. Un intento de mosh me permitió avanzar. Luego de media hora noté que a cada paso con el cual yo avanzaba vos retrocedias cinco.
El tiempo corría y mis ilusiones se desvanecían. Logré sentarme a descansar encima de una roca. Apoye mi ya débil cuerpo.
Te mire nuevamente. Allí estabas. Tu amplia sonrisa permanecía intacta. Por un momento no había nadie más que nosotros. La multitud comenzaba a desvanecerse. Tu sonrisa fresca. No había ya nada. Sólo tu y yo. Tu sonrisa comenzaba a irritarme.
Intenté levantarme pero el cuerpo no me respondía.
No lograba comprender, yo me estaba alejando; tu estabas avanzando. Tu sonrisa intacta -aún- ironía con la cual me intimidabas.
El tiempo ya no avanzaba, corría. Quizá pasaron siglos, al menos eso me pareció.
Finalmente allí estabas, un paso ante mi. Tu sonrisa intacta. Extendiste tu mano, mi cuerpo respondió. Cara a cara. Mirada a mirada. Respiración a respiración. Boca a boca. Algo estaba fallando en mis calculos. Algo andaba mal. Tu sonrisa en lo alto.
Y en eso una brisa derrumbó todo. Un aleteo pudo derrumbar aquello.
Abrí los ojos para soñar nuevamente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario