Hay cosas que son innecesarias en la vida y otras que no lo son.
Quizá me resulte necesario un abrazo tuyo, un beso, una mirada; una caricia. Quizá no.
Hoy que ya no queda más nada por hacer, porque no hay nada que hacer, recuerdo y recuerdo. Lo raro es que no puedo sentir rencor, sólo lástima. Quizá.
Escuchar cierta banda, recordar tu respiración y tus fantasiosas palabras, tu mirada y el reflejo de aquel dvd en tus lentes.
Mínimas cosas que ayer me eran insignificantes, cosas pequeñas que hoy me hacen sentir feliz al no tenerlas.
Muchas veces dije adiós, lo sé. Es que siempre tuve ese presentimiento de que nunca sería una despedida, si no un hasta siempre.
Hoy es distinto, te dejo ahi donde siempre debi dejarte para nunca encontrarte.
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